La relación sentimental entre el cantante mexicano Luis Miguel y la española Paloma Cuevas está en la mira, sobre todo por las recientes imágenes en las que aparecen de lo más felices, celebrando el Día del Amor en Nueva York.
La relación sentimental entre el cantante mexicano Luis Miguel y la española Paloma Cuevas está en la mira, sobre todo por las recientes imágenes en las que aparecen de lo más felices, celebrando el Día del Amor en Nueva York.
El denominado Sol de México y la diseñadora fueron vistos en la Gran Manzana disfrutando de una cena en el piano bar del Hotel Carlyle. Un fan mexicano, Hernán Junco, captó las imágenes y las compartió en las redes sociales cómo había sido su encuentro con el artista y su novia. Fue así como pudimos saber que se les vio felices, acaramelados y "con los brazos entrelazados".
La feliz pareja disfrutó su estadía en Nueva York, donde visitaron también la tienda de Ralph Lauren en Madison Avenue, en el Upper East, antes de regresar a Madrid. Allí, Luis Miguel y Paloma Cuevas se mostraron "relajados y sonrientes" y "con look monocromático", tal y como destaca la periodista mexicana Luisa Serna Barrera en sus redes sociales.
El intérprete de “La Incondicional” ha llamado la atención por su imagen renovada y la felicidad que desborda con su pareja, con quien desde hace meses se les ha visto juntos en diferentes situaciones.
Amigos de la pareja han destacado que la relación va de lo mejor. "Se merecen los dos ser muy felices", recalcaba hace unos días Rosa Clará, diseñadora y amiga íntima de Paloma.
Por su parte, la revista española HOLA! destaca que se trata del primer San Valentín que celebran Luis Miguel y su nueva pareja. “La empresaria, separada desde hace 3 años y casi 2 divorciada de Enrique Ponce, y ‘El Sol de México’ son muy amigos desde niños y, sorpresas que te da la vida, esa bonita amistad se ha convertido en una relación muy especial”, indica el medio.
También apuntan a que, Luis Miguel, de 52 años de edad, al parecer está en su mejor momento físico y emocional. “Aunque va vestido de negro de pies a cabeza, se aprecia que está visiblemente más delgado y su rostro, bronceado, también es un reflejo de que Luis Miguel vuelve a ser el de siempre. El secreto, podemos atrevernos a decir que reside en la mujer de la que se ha vuelto prácticamente inseparable desde que vino a España el pasado verano: Paloma Cuevas”, indican.