La relación sentimental entre Gerard Piqué y Clara Chía Martí inició en medio de una controversia y rumores de infidelidades ya que, al parecer, fue la tercera en discordia en la separación entre el catalán y Shakira.
La relación sentimental entre Gerard Piqué y Clara Chía Martí inició en medio de una controversia y rumores de infidelidades ya que, al parecer, fue la tercera en discordia en la separación entre el catalán y Shakira.
A partir del momento en el que oficializaron su relación se convirtieron en una de las parejas más escandalosas a nivel internacional en el mundo del espectáculo. Recientemente la joven estudiante cumplió 24 años y el jugador le regaló un auto valuado 220mil dólares.
Medios españoles han asegurado que el ex jugador le regaló a Chía Martí un modelo Aston Martin DB9 GT. Según informaron, distintos civiles la vieron manejando dicho auto por las calles de Barcelona.
Desde que inició su relación con Gerard Piqué, la vida de Clara Chía se convirtió en centro de atención y de ser estudiante y mesera pasó a disfrutar de todos los lujos que puede ofrecerle el exdeportista.
Y es que, además del lujoso automóvil, trascendió que también le regaló un viaje a Abu Dhabi, la capital de los Emiratos Árabes y una de las ciudades más costosas en el mundo. La pareja no eligió este destino solo por los lujos, sino porque es una de las pocas ciudades donde los paparazzis no pueden perseguirlos por las calles.
Se trató de un viaje rápido con el que decidieron liberar tensiones y liberarse también de la prensa que los sigue de forma constante desde la sonada ruptura de Gerard Piqué con Shakira.
El viaje ocurre a pocos días de que el dueño de la Kings League vaya a Miami, la primera en la que visitará a sus hijos, Milán y Sasha. Un viaje que no podrá compartir con su novia.
También, desde el portal Nueva Mujer, revelaron que Gerard Piqué le regaló a Clara Chía una vivienda, la cual sería una mansión valuada en 4 millones de euros. Sin embargo, parece que la joven de 24 años y el empresario se instalarán en la casa que Gerard compartía con Shakira, en Esplugles de Llobregat.