Desde el inicio de la historia, los seres humanos hemos ido evolucionando con el paso de los siglos, y aunque muchos piensan que ya no habrá más modificaciones en nuestro cuerpo, algunos estudios determinaron que la tecnología podría influir en ello dentro de algunos años.
Todo esto se debe específicamente en el uso de los dispositivos electrónicos, los cuales nos obligan a tener una postura más incómoda, generando un cuerpo más encorvado. Es por ello que Miguel Delgado doctor en ciencias naturales y antropólogo dio su perspectiva sobre la morfología de los seres humanos.
“Después de la pandemia, las personas nos dimos cuenta que muchas actividades las podíamos hacer en casa con la tecnología, como ir al super y hasta trabajar. Esto podría generar cambios a un nivel evolutivo amplio, porque la gente empezó a tener un estilo de vida distinto", inició en un diálogo con Infobae.
"Los cambios evolutivos no son aislados y suelen correlacionarse con modificaciones en más de una parte del cuerpo. Es una especie de efecto cascada de la evolución”, destacó.
¿Qué depara a la morfología humana debido a la tecnología?
Aunque muchos especialistas alegan que aún muy temprano para poder llegar a una conclusión sobre el cambio en los cuerpos de los seres humanos, Delgado acotó: “Hay estudios que son algo futuristas y evalúan los posibles escenarios evolutivos, e indican que los cambios son más acelerados que antes".
"En este contexto, debido a la falta de movilidad, las personas tendrían una reducción en el tamaño de las piernas. Además, el cerebro, con el uso de las pantallas, también sufrirá cambios. De hecho, tendríamos la cabeza un poco más grande. Y el tercer molar, la muela de juicio, iría desapareciendo”.
“Aún es todo especulativo pero si dejamos de hacer actividad física y cada vez nos movemos menos, se podría ver una reducción del tamaño de las piernas, tal como se mencionó anteriormente. Estos cambios morfológicos son más lentos que otros cambios: se trata de miles e incluso millones de años, por lo que se esperan para un futuro lejano”, resaltó.
“Los humanos modernos estamos adaptados a una intensa actividad física, pero con el tiempo eso se ha ido minimizando. La gente cada vez hace menos ejercicio y eso tiene implicaciones en cuestiones morfológicas y también comportamentales", continuó el especialista.
"Ahora, hay quienes prefieren interactuar desde la computadora, y esto va impactando a nivel morfológico y también en el comportamiento y en la parte cognitiva. La baja actividad física incrementa los niveles de colesterol, el consumo de carbohidratos también. Así, la sociedad se podría transformar en una sociedad obesa”, reflejó sobre este importante tema.